Debido a que el Neem es algo nuevo para los científicos occidentales, el número de estudios farmacológicos es algo limitado. En esos estudios que se han realizado, las conclusiones generales son que el Neem no solo elimina directamente algunos organismos infecciosos, si no también contribuirá a la respuesta inmune en diversos niveles. Esto incrementa la habilidad del cuerpo para combatir por si solo infecciones bacteriológicas, virales y fungicidales.
Esta combinación de efectos es más efectiva a largo plazo debido a que los químicos infectan suficientemente para eliminar todos los microbios, también arma un cuerpo saludable y no causa efectos secundarios no deseables. Un sistema inmune mejorado puede seleccionar y eliminar todos los microbios invasores sin afectar adversamente a otras células.
Cuando es invadido por microbios (o cualquier otro sujeto que el cuerpo reconoce como extraño), el sistema inmune suelta anticuerpos que captura y neutraliza al intruso. El Neem no solo incrementa la producción de anticuerpos, también mejora la respuesta de las células inmuno-mediadoras que liberan glóbulos blancos para matar a los invasores. En este tipo, carroñosas especiales en la sangre llamadas macrófagos devoran los microbios y pedazos presentes de ellos junto con sus moléculas superficiales. Solo después que los macrófagos (u otras células antígenas presentes) presentan pedazos de microbios como antígenos ayudarán a las células T a reconocer los antígenos.
Esta ayuda a las células T realizan mensajes químicos llamados citokina, las que se unen a otras células del sistema inmune para contrarrestar el ataque (Upadhyay,1990). Incrementando la primera linea de defensa del cuerpo, el Neem auxilia al sistema inmune a responder más rápidamente a las infecciones que de otra forma ganarían firmeza y serían más dificiles de superar.
Esta combinación de efectos es más efectiva a largo plazo debido a que los químicos infectan suficientemente para eliminar todos los microbios, también arma un cuerpo saludable y no causa efectos secundarios no deseables. Un sistema inmune mejorado puede seleccionar y eliminar todos los microbios invasores sin afectar adversamente a otras células.
Cuando es invadido por microbios (o cualquier otro sujeto que el cuerpo reconoce como extraño), el sistema inmune suelta anticuerpos que captura y neutraliza al intruso. El Neem no solo incrementa la producción de anticuerpos, también mejora la respuesta de las células inmuno-mediadoras que liberan glóbulos blancos para matar a los invasores. En este tipo, carroñosas especiales en la sangre llamadas macrófagos devoran los microbios y pedazos presentes de ellos junto con sus moléculas superficiales. Solo después que los macrófagos (u otras células antígenas presentes) presentan pedazos de microbios como antígenos ayudarán a las células T a reconocer los antígenos.
Esta ayuda a las células T realizan mensajes químicos llamados citokina, las que se unen a otras células del sistema inmune para contrarrestar el ataque (Upadhyay,1990). Incrementando la primera linea de defensa del cuerpo, el Neem auxilia al sistema inmune a responder más rápidamente a las infecciones que de otra forma ganarían firmeza y serían más dificiles de superar.